En el sexto año de la Hegira, el Mensajero de Alá (la paz y las bendiciones de Dios sean con él) anunció su intención de hacer `Umrah y partió con 1.400 hombres, sin armas excepto por la espada envainada portada normalmente por un viajero. Sus compañeros llevaban con ellos los animales para el sacrificio. Cuando Quraish supo de esto, se reunieron para impedirles que llegaran a la Mezquita Sagrada (al-Masyid al-Haraam).
Narró el Emir de los creyentes Abu Hafs 'Omar Ibn Al-Jattab (que Allah esté complacido con él): Oí al Mensajero de Alá (la paz sea con él) decir: “Ciertamente las buenas obras dependen de las intenciones (niiah), y cada hombre tendrá según su intención; así, aquel cuya emigración haya sido por causa de Alá y su Mensajero, su emigración habrá sido por Alá y su Mensajero, y aquel cuya emigración haya sido por conseguir algún beneficio mundanal o por tomar a una mujer en matrimonio, su emigración habrá sido para aquello por lo que emigró.” (Este Hadiz fue transmitido por los dos Imames Al-Bujari y Muslim en sus dos libros de narraciones auténticas, que son los mejores libros de compilación de Hadices)